Los recién nacidos son una de las grandes maravillas de la naturaleza. La fragilidad y la ternura a la máxima potencia. Si es posible, os recomendamos hacer las fotos de vuestros bebés recién nacidos en sus primeros 10 días de vida. Así tendréis un recuerdo de vuestro bebé "recién salido del horno". Ya que es increíble cómo cambian tras el primer mes de vida.

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     En estas sesiones se consiguen aquellas imágenes tan tiernas de bebés dormiditos, con las piernas encogidas, como si estuvieran todavía en la barriga de mamá. Nos encanta documentar lo pequeñitos que parecen en los brazos de sus padres. Invertimos mucho tiempo tomando fotografías de detalles de sus manos, sus pies, sus caritas, ... para que no se olviden nunca.

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     Si has optado por la lactancia materna, y te hace ilusión, una foto del bebé mamando en el pecho es un regalo para toda la vida. Un maravilloso recuerdo a conservar.

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     Las sesiones de recién nacidos suelen ser más largas que otro tipo de sesiones porque tenemos que hacerlas con calma debido a las pausas necesarias para las tomas, el cambio de pañales o calmar al bebé. Para comodidad de todos, la localización ideal para estas sesiones es el hogar del bebé.